Ignoro ya qué es luz y qué oscuridad.
  El tiempo huye,
  No reconozco nada de lo que me rodea.
  ha teñido sus ramas de negro
  La luz duele, ciega los ojos.
  y nos ha abandonado
  La oscuridad despierta lágrimas de sanación.
  sobre un cristal a nuestra suerte.

 
No hay comentarios:
Publicar un comentario