Valoración: Bueno ✮✮✮✩✩
Música: To the Edge of Dream, de Toru Takemitsu ♪♪♪
Dicen que el mundo se divide en dos: murakamistas y no murakamistas.
Y yo intento mantener un equilibrio zen, pero...
Soy murakamista. A mucha honra.
Por eso se me iluminan los ojos cuando empiezo a distinguir los contornos de estos relatos, las raíces que entrelazan sus cimientos, los hilos que sostienen sus paredes.
Esas atmósferas que casi puedes tocar. Que rozan tu piel mientras lees.
Aunque, para ser sinceros, no siempre tengas del todo clara cuál es la historia que te están contando. ¿Qué importa?
Porque al final... El elefante desaparece.
El de Haruki Murakami, por supuesto.