Cuando no sabes qué decir. Ni siquiera qué decirte a ti mismo.
Cuando todo parece un círculo, sin un lejos, sin un cerca, sin un quizá liberador jamás.
Cuando no puedes distinguir, un día y otro día, cuál es la pregunta y cuál es la respuesta.
Aún te queda el silencio. Calla. Escucha. Solo escucha…